MEJOR MANTENER QUE LAMENTAR

¿Quién podría negar que el mantenimiento preventivo, correctivo y predictivo de ascensores no sólo reduce los riesgos de averías o desperfectos, sino que también previene accidentes? En los efectos, las dos posibilidades se implican, una respecto de la otra: cuanto más disminuidas las contingencias, tanto menos probabilidades de accidentes.

Cuanta más acciones preventivas, tanto menos incidentes lamentables. Cualesquiera sean las características de los elevadores, las tareas de conservación redundan en seguridad para los usuarios, destinatarios finales del transporte vertical.